Los lugares antiguos guardan innumerables historias de varias generaciones, pero también se dice que algunas almas se quedan estancadas en e...
Los lugares antiguos
guardan innumerables
historias de varias generaciones, pero también
se dice que algunas almas se
quedan estancadas en este
plano terrenal porque no
tienen noción de que ya fallecieron o porque están
muy apegadas a lo material.
El Teatro Jorge Eliécer
Gaitán en Bogotá, precisamente, no es ajeno a ello y
decenas de personas que
han trabajado en este lugar
emblemático de la capital
han dado fe de las actividades paranormales que se
mueven en su interior.
andra Vega, por ejemplo, es la encargada del vestuario del emblemático teatro, que fue fundado en
1940. Ella lleva trabajando
allí durante 20 años y le
compartió su relato al
Instituto Distrital de las
Artes (Idartes), que actualmente se encuentra recopilando este tipo de historias para compartirlas con
los cibernautas (ver recuadro abajo.
“Esto ocurrió en agosto
de 2002, cuando se celebraba el cumpleaños de
Bogotá. Los guardas de seguridad comenzaron a quejarse porque después de las
10:30 p. m. se escuchaban
ruidos en la Platea de una
persona que excavaba con
una pica, pausaba mientras
volvía a coger fuerzas, y seguía en su tarea.
Una noche yo me quedé imprimiendo unas boletas y
comoalas 12 de la noche escuché cómo cavaban, vino
la Policía y decidió hacer
un plan sobre toda la manzana para confirmar si alguien estaba construyendo
por ahí cerca. Todos los establecimientos que rodean
el Jorge Eliécer son restaurantes, así que confirmaron
que nadie estaba construyendo. Al parecer, era el
dueño de la casa, que es un
espíritu, a quien le daba por
cavar todas las noches”,
afirmó la mujer.
Más historias...
Pero ella no ha sido la única que ha presenciado actividades paranormales ,
Azucena Cardoso es una trabajadora de servicios generales que asegura haber visto la silueta de un hombre
alto y delgado, vestido con
un traje de época, quien estaba en la escalera que conduce a los palcos; no obstante, en un abrir y cerrar
de ojos aquel misterioso sujeto se esfumó.
Son innumerables las historias paranormales que
abarca este concurrido escenario insignia de la capital, que por estos días de
aislamiento parece habitado
únicamente por fantasmas.
Dicen que allí los grifos de
agua se abren y se cierran
sin explicación alguna, las
puertas se cierran con violencia, se sienten presencias que le ponen a más de
uno la piel de gallina, y hasta prenden y apagan las luces, como si se tratara de
almas traviesas.
EXPLICACIÓN DE UN EXPERTO
Q’HUBO contactó a Alexánder Torres, director de la Academia de
Parapsicología Urantia, y nos explicó que “esta manifestación podría tratarse del dueño del sitio que está mostrando que enterró algo en ese lugar.
No solo estoy hablando de oro o dinero precisamente, sino algún tipo de
artículo que para él era muy amado o valioso mientras estuvo en vida.
También se tendría que revisar si alguna de las personas que trabajó en la
construcción del teatro murió y su energía quedó impregnada en el sitio.
Recordemos que en un teatro quedan impregnadas energías de todo tipo”.
OTRAS HISTORIAS QUE MERECEN SER CONTADAS
Ideartes prepara una serie de historias paranormales que han ocurrido en los
lugares más concurridos por los bogotanos, entre los escenarios figuran el
Planetario Distrital, el Teatro El Parque, La Media Torta y la antigua Cinemateca
Distrital, entre otros.
ASÍ NACIÓ LA IDEA...
Mauricio Galeano, subdirector de equipamientos
culturales de Idartes, nos
contó que la idea inicial era
recopilar la memoria de los
lugares más tradicionales
de Bogotá, pero los relatos
paranormales salieron a
flote. “Cuando empezamos
a recuperar las historias de
los teatros, empezaron a
salir estos temas y estas
experiencias, por lo que
decidimos darlas a conocer
desde las personas que las
han vivido directamente”,
le contó a Q’HUBO.
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