Liliana Cardona Marín En este municipio del norte de Risaralda, pasan cosas de literatura: una misma edificación ha sido sede de Bomberos y ...
Liliana Cardona Marín
En este municipio del norte de Risaralda, pasan cosas de literatura: una misma edificación ha sido sede de Bomberos y espacio para la Inspección de Policía, Oficina de Obras Públicas, patio de tránsito, Casa de Cultura y se perfila como plan B del Hospital. Los dos principales colegios funcionan en varias partes y a la vez, este bello municipio es punto de llegada de la Vuelta a Colombia y próximamente realizará ‘La Calle del Café’, evento para el que ya fueron enviadas las invitaciones.
Esta historia comenzó hace tres años cuando un grupo de mujeres madres cabeza de familia y otras tantas desplazadas por el conflicto decidieron crear la Asociación de Mujeres Organizadas (Amo) Apía. Durante este tiempo, estas 60 mujeres han adelantado todo tipo de proyectos: ventas de comestibles, artesanías y hasta un proyecto de agroecología en el que participó la Carder.
La señora González afirma que la sede que les entregaron cuenta con seis salones, tiene un área construída y un patio en el que se puede edificar más. La sede les fue entregada por cinco años para poner en funcionamiento la empresa de confección y brindar capacitación en corte y confección a otras mujeres.
“Las máquinas de coser fueron adquiridas por la Alcaldía el 13 de diciembre del año pasado, inicialmente teníamos seis meses para hacer la instalación de las mismas, eso nos dijo la señora que las vendió y ya estamos viendo que se les va a terminar la garantía. De hecho algunas de las máquinas ya están botando aceite, porque deben estar armadas, el lugar también tiene algunas goteras y cuando llueve algunas máquinas se mojan”, informó doña Bibiana.
El problema se generó cuando les entregaron el contrato y ellas observaron que los salones estaban ocupados por los profesores de bachillerato rural, empresas de agua, maquinaria de Planeación y las motos de la Inspección. Lo que la lleva a comentar: “Nosotras no recibimos el sitio 100% desocupado y ahí empezó el desgaste por parte nuestra, porque esta Administración no ha hecho caso a Derechos de Petición, se escudan, salen con otras historias y siguen invadiendo el sitio”.
Se supo que en una reunión entre las partes y al ser un espacio tan grande, el alcalde les propuso adecuar lo que ellas necesitaban y que le dejaran lo otro, lo que a ellas les pareció bien, pero a cambio les pidió terminar el contrato de Comodato, pues les dijo que de otra manera no podía hacer las adecuaciones, lo que motivó que las mujeres desconfiaran de las verdaderas intenciones del burgomaestre, situación que las llevó a cambiar la chapa de la puerta principal.
El mandatario dice que se ha reunido en cinco oportunidades con las mujeres sin llegar a ningún acuerdo, por eso les pidió que se anulara el contrato de forma unilateral e hicieran uno nuevo que especificara el espacio al que ellas tenían derecho. “No puedo permitir entregar en Comodato la Casa de la Cultura, donde además funciona el colegio Sagrada Familia. El próximo 17 de julio, tendremos una reunión grande con Personería, Defensoría del Pueblo, Alcaldía, Junta y asociadas de Amo, estarán los medios de comunicación y vamos a hacer un acta, porque esto no se trata de rumores, soy el administrador de los bienes de un pueblo y con eso no se juega”.
La cereza del pastel en este caso es el proyecto del Hospital San Vicente de Paul, cuyo lugar de contingencia es esta misma edificación, propuesta hecha desde enero de 2023, lo que genera un conflicto de intereses. “Lo otro, la Empresa de Servicios Públicos tiene ahí una bodega hace 15 años y la Inspección de Policía guarda las motos decomisadas en otro salón. No es que yo no quiera hacer las cosas, sino que en Derecho y en la ley, hay muchas variantes que sopesar”, recordó Hoyos Henao.
El alcalde aparte de todo lo ya mencionado expuso que a su administración le tocó pagar las máquinas de coser, porque la alcaldía anterior no hizo sino ‘bananiar’, a la profesora que las vendió, “¿Si era plata de Presupuesto por qué no pagaron y dejaron todo saneado?”. Jorge Andrés Henao puntualiza que las únicas que le revuelven política a este tema son ellas y que no lo reconocen como alcalde.
En una de varias correspondencias que se han cruzado la Asociación y la Alcaldía, fechada el 30 de abril de este año, se deja constancia sobre la poca seguridad en la que se encuentran dos máquinas que juntas valen casi $90 millones, porque el salón más seguro está ocupado con motos.
En este municipio del norte de Risaralda, pasan cosas de literatura: una misma edificación ha sido sede de Bomberos y espacio para la Inspección de Policía, Oficina de Obras Públicas, patio de tránsito, Casa de Cultura y se perfila como plan B del Hospital. Los dos principales colegios funcionan en varias partes y a la vez, este bello municipio es punto de llegada de la Vuelta a Colombia y próximamente realizará ‘La Calle del Café’, evento para el que ya fueron enviadas las invitaciones.
Esta historia comenzó hace tres años cuando un grupo de mujeres madres cabeza de familia y otras tantas desplazadas por el conflicto decidieron crear la Asociación de Mujeres Organizadas (Amo) Apía. Durante este tiempo, estas 60 mujeres han adelantado todo tipo de proyectos: ventas de comestibles, artesanías y hasta un proyecto de agroecología en el que participó la Carder.
Versión 1. Las mujeres de Amo
Bibiana González Granada, una de las integrantes de esta Asociación, atendió para contar lo que al modo de ver de ellas es un flagrante abuso en contra de su género, condición socioeconómica y política: “El 29 de diciembre de 2023, la anterior administración nos entregó en Comodato un bien inmueble que antes era la antigua sede de Bomberos, porque al recibir una maquinaria por $456 millones a través Presupuesto Participativo, debíamos tener un sitio para recibirla”. |
| Asociación de Mujeres Organizadas de Apía. |
La señora González afirma que la sede que les entregaron cuenta con seis salones, tiene un área construída y un patio en el que se puede edificar más. La sede les fue entregada por cinco años para poner en funcionamiento la empresa de confección y brindar capacitación en corte y confección a otras mujeres.
“Las máquinas de coser fueron adquiridas por la Alcaldía el 13 de diciembre del año pasado, inicialmente teníamos seis meses para hacer la instalación de las mismas, eso nos dijo la señora que las vendió y ya estamos viendo que se les va a terminar la garantía. De hecho algunas de las máquinas ya están botando aceite, porque deben estar armadas, el lugar también tiene algunas goteras y cuando llueve algunas máquinas se mojan”, informó doña Bibiana.
El problema se generó cuando les entregaron el contrato y ellas observaron que los salones estaban ocupados por los profesores de bachillerato rural, empresas de agua, maquinaria de Planeación y las motos de la Inspección. Lo que la lleva a comentar: “Nosotras no recibimos el sitio 100% desocupado y ahí empezó el desgaste por parte nuestra, porque esta Administración no ha hecho caso a Derechos de Petición, se escudan, salen con otras historias y siguen invadiendo el sitio”.
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| Así se ven las máquinas al interior de la edificación de la discordia. |
Versión 2. El alcalde de Apía
Jorge Andrés Hoyos Henao es el alcalde y ante las denuncias que hacen las mujeres, quejas que dijo conocer con anterioridad, acotó que “El tema es que cuando a nosotros nos hacen el empalme, no nos hablan nada de ese tema y cuando me posesiono encuentro el Comodato firmado a dos días de terminar la alcaldía anterior, lo que me parece una falta de respeto. Al examinar el documento vimos que la ficha catastral corresponde no solo a la edificación donde ellas están, sino que abarca la Casa de la Cultura y otras edificaciones públicas que están en la parte de atrás”. |
| Jorge Andrés Hoyos Henao, alcalde de Apía. |
La cereza del pastel en este caso es el proyecto del Hospital San Vicente de Paul, cuyo lugar de contingencia es esta misma edificación, propuesta hecha desde enero de 2023, lo que genera un conflicto de intereses. “Lo otro, la Empresa de Servicios Públicos tiene ahí una bodega hace 15 años y la Inspección de Policía guarda las motos decomisadas en otro salón. No es que yo no quiera hacer las cosas, sino que en Derecho y en la ley, hay muchas variantes que sopesar”, recordó Hoyos Henao.
El alcalde aparte de todo lo ya mencionado expuso que a su administración le tocó pagar las máquinas de coser, porque la alcaldía anterior no hizo sino ‘bananiar’, a la profesora que las vendió, “¿Si era plata de Presupuesto por qué no pagaron y dejaron todo saneado?”. Jorge Andrés Henao puntualiza que las únicas que le revuelven política a este tema son ellas y que no lo reconocen como alcalde.
¿Tendrán alguna póliza?
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