José Antonio Escobar, un gran hombre de 55 años, perdió la vida en un trágico accidente de tránsito en la mañana de ayer, en el municipio de...
José Antonio Escobar, un gran hombre de 55 años, perdió la vida en un trágico accidente de tránsito en la mañana de ayer, en el municipio de La Virginia. El incidente ocurrió cuando regresaba a su hogar después de culminar su jornada laboral como vigilante.
¿Qué sucedió?
El accidente se registró a las 6:40 de la mañana. José Antonio había entregado su turno a las 6:00 a.m. en la clínica Los Nevados de Pereira y se dirigía a su casa en su motocicleta Suzuki Hayate, de placa VXA91D. Según las autoridades, la primera hipótesis es que sufrió un microsueño y chocó contra la baranda metálica de la vía, ya que en el lugar no había otros vehículos involucrados en el momento en que lo atendieron.
Varios motociclistas que pasaban por el lugar vieron al hombre tendido en la vía y gravemente herido, alertando a las autoridades policiales y a los bomberos. José Antonio fue auxiliado por organismos de socorro, entre ellos personal de Pacífico Tres y un médico presente en el lugar. Fue trasladado al hospital San Pedro y San Pablo de La Virginia, a donde ingresó con un trauma craneoencefálico severo y un trauma de tórax cerrado. Lamentablemente, falleció minutos después, sin alcanzar a ser remitido a otro centro asistencial.
Las autoridades de tránsito del Puerto Dulce de Colombia se encargaron de la investigación del siniestro vial. El grupo de criminalística de la Sijín de Pereira realizó la inspección técnica del cuerpo, el cual fue trasladado a Medicina Legal para su respectiva necropsia.
La Noticia
Sebastián Rojas, hijastro de Toño como era conocido cariñosamente por sus familiares y amigos, manifestó que la víctima lo acogió como su hijo desde que tenía 9 años, vio por él, era muy prudente al conducir, "solo manejaba moto, los agentes de tránsito expresaron que no estaba bajo efectos de bebidas embriagantes ni conducía con exceso de velocidad. Le dio un microsueño, lo venció el cansancio, ya iba para la casa a descansar", añadió Sebastián.
Agregó que conocieron la noticia por un vecino del barrio que se dio cuenta del accidente. "Cuando llegamos al hospital él ya había muerto, no hubo mucho que hacer por él, y no sufrió como en otros casos de siniestros viales". Su muerte deja un vacío irreparable en su familia y en la comunidad que lo conocía.
Su vida
José Antonio Escobar tenía un hermano radicado en el municipio de Viterbo, Caldas, y deja una hija mayor de edad. Era natural del municipio de Palestina, Caldas. Trabajó en vigilancia privada por más de seis años, actualmente para la empresa de seguridad privada Atlas, cumpliendo funciones en la clínica Los Nevados de Pereira. Vivía desde hace 19 años en La Virginia con su esposa, con la que vivió 17 años de amor en el barrio Las Américas.
"Era una persona muy tranquila, trabajadora, responsable, buen esposo. No era de problemas ni vicios, era una persona muy sana, honesta, una calidad de persona. Fue muy buen hijo cuando su mamá estaba viva, respondió por ella siempre", expresó Sebastián.
¿Qué sucedió?
El accidente se registró a las 6:40 de la mañana. José Antonio había entregado su turno a las 6:00 a.m. en la clínica Los Nevados de Pereira y se dirigía a su casa en su motocicleta Suzuki Hayate, de placa VXA91D. Según las autoridades, la primera hipótesis es que sufrió un microsueño y chocó contra la baranda metálica de la vía, ya que en el lugar no había otros vehículos involucrados en el momento en que lo atendieron.
Varios motociclistas que pasaban por el lugar vieron al hombre tendido en la vía y gravemente herido, alertando a las autoridades policiales y a los bomberos. José Antonio fue auxiliado por organismos de socorro, entre ellos personal de Pacífico Tres y un médico presente en el lugar. Fue trasladado al hospital San Pedro y San Pablo de La Virginia, a donde ingresó con un trauma craneoencefálico severo y un trauma de tórax cerrado. Lamentablemente, falleció minutos después, sin alcanzar a ser remitido a otro centro asistencial.
Las autoridades de tránsito del Puerto Dulce de Colombia se encargaron de la investigación del siniestro vial. El grupo de criminalística de la Sijín de Pereira realizó la inspección técnica del cuerpo, el cual fue trasladado a Medicina Legal para su respectiva necropsia.
La Noticia
Sebastián Rojas, hijastro de Toño como era conocido cariñosamente por sus familiares y amigos, manifestó que la víctima lo acogió como su hijo desde que tenía 9 años, vio por él, era muy prudente al conducir, "solo manejaba moto, los agentes de tránsito expresaron que no estaba bajo efectos de bebidas embriagantes ni conducía con exceso de velocidad. Le dio un microsueño, lo venció el cansancio, ya iba para la casa a descansar", añadió Sebastián.
Agregó que conocieron la noticia por un vecino del barrio que se dio cuenta del accidente. "Cuando llegamos al hospital él ya había muerto, no hubo mucho que hacer por él, y no sufrió como en otros casos de siniestros viales". Su muerte deja un vacío irreparable en su familia y en la comunidad que lo conocía.
Su vida
José Antonio Escobar tenía un hermano radicado en el municipio de Viterbo, Caldas, y deja una hija mayor de edad. Era natural del municipio de Palestina, Caldas. Trabajó en vigilancia privada por más de seis años, actualmente para la empresa de seguridad privada Atlas, cumpliendo funciones en la clínica Los Nevados de Pereira. Vivía desde hace 19 años en La Virginia con su esposa, con la que vivió 17 años de amor en el barrio Las Américas.
"Era una persona muy tranquila, trabajadora, responsable, buen esposo. No era de problemas ni vicios, era una persona muy sana, honesta, una calidad de persona. Fue muy buen hijo cuando su mamá estaba viva, respondió por ella siempre", expresó Sebastián.
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